usted verbos pueden ser la gran pesadilla de aquellos que nunca entendieron muy bien el portugués en la escuela, pero si hay algo que nos acompaña en la vida es la presencia de los verbos, mucho más de lo que podemos imaginar.
Muchos siempre se preguntaron, durante el tiempo que asistieron a la escuela, cómo ayudarían esas fórmulas y números de las matemáticas en su vida diaria. Bueno, para aquellos que construyeron una carrera como ingeniero, por ejemplo, eso fue ciertamente de gran valor.
Por otro lado, muchos también se preguntaron cómo les ayudarían esos diferentes verbos y diferentes palabras después de salir de la escuela, y créanme, esto sigue siendo parte de la rutina de miles de personas.
Después de todo, siempre necesitamos escribir algo, ya sea un informe sobre la empresa para la que trabaja o incluso cuando decidimos buscar un determinado producto o servicio como ensayos e inspección no destructivos.
Esto significa que, independientemente de cuál sea nuestra función o posición, siempre necesitaremos poner manos a la obra y escribir algo, y cuando no entendemos la función de los verbos, esto puede convertirse en un gran desafío.
Por eso, hemos preparado material exclusivo para ayudarte a entender más sobre los verbos, qué son, sus funciones, estructuras y cómo marcan la diferencia a la hora de producir algún tipo de texto o simplemente buscar algo en internet.
Entender qué son los verbos.
El verbo puede entenderse como una clase gramatical de expresiones y palabras que representan alguna acción o estado, es decir, cualquier palabra que se refiera a ella puede denominarse verbo.
Mira un ejemplo en la oración: “Cláudia está buscando un bomba de engranajes en internet”, la palabra “buscando” puede interpretarse como un verbo precisamente porque indica la acción del sujeto dentro de esa oración.
De la misma forma sucede cuando queremos hablar del estado de alguien, por ejemplo: "Pedro se siente mal porque sacó una nota baja en su examen", en este caso nos referimos al estado en que se encuentra el sujeto, y también entra en la familia de verbos.
Con esto, podemos ver que los verbos están más presentes de lo que imaginamos en nuestro día a día, ya que es muy fácil usarlos dentro de cualquier tipo de oración que le comuniquemos a alguien, ya sea escrita o hablada.
Esto se debe a que sirven precisamente para expresar alguna acción o estado, ya sea nuestro o de otra persona, y en todo momento estamos haciendo o sintiendo algo que, cuando nos comunicamos, siempre saldrá en forma de verbo.
Sin embargo, debes tener mucho cuidado, porque usar un verbo de manera incorrecta o en un contexto incorrecto puede hacerte ver confundido y nadie entiende lo que comunicas, ya sea cuando buscas un celda automatizada o incluso para charlar con un amigo.
Por eso es tan importante conocer los verbos y de qué se componen, precisamente para que la estructuración de tus oraciones y discursos sea más coherente y clara para que todos puedan entender exactamente el mensaje que quieres transmitir.
Una oración creada con un verbo incorrecto o incluso la falta del mismo compromete por completo su mensaje e incluso puede entorpecer su desempeño profesional, reduciendo sus posibilidades de construir una carrera exitosa.
Ya sea en el trabajo, al producir un informe sobre automatización de enfriadores o incluso en el intercambio de mensajes con un amigo o familiar, los verbos siempre están presentes.
Por eso, estudiando más sobre ellos y comprender todo lo que ayuda a construir estos verbos es esencial para que adquiera más conocimiento sobre esta parte importante de la lengua portuguesa.
Aprende sobre estructuras verbales, inflexiones y estados de ánimo.
Así como aquellos que buscan variador de frecuencia comprar encuentra diferentes tipos de resultados, los verbos también tienen diferentes tipos a la hora de su estructuración y eso es precisamente lo que abordaremos ahora.
Dentro del universo de los verbos, existe la estructura, las inflexiones y los modos verbales que ayudan en la construcción de oraciones coherentes y correctas en la lengua portuguesa normativa, pero tenga la seguridad de que hablaremos más sobre cada una de estas partes poco después.
Estructura
Un verbo tiene tres partes en su estructura, que son: raíces, vocal temática y terminación. La raíz es la parte que da origen al verbo y, precisamente por eso, no suele cambiar durante las flexiones.
La vocal temática se refiere a la vocal que sigue a la raíz. Los verbos pueden ser de 1ª conjugación, es decir, vocal temática a, terminada en -ar; de 2ª conjugación, donde la vocal temática e, acabada en -er; o 3ª conjugación, cuando la vocal temática i, termina en -ir.
La terminación es la parte final de la oración, que expresa el tiempo y la persona del verbo. Por ejemplo, en la oración: “La niña necesita nuevas citas a trabajar”, logramos encontrar esta estructura.
Lagartijas
Hablando de flexiones, debemos entender que los verbos se flexionan según el número, la persona, el modo, el tiempo y la voz de cada oración.
En cuanto al número, podemos tener el sujeto tanto en singular como en plural. El sujeto también puede ser de 1ª, 2ª o 3ª persona, siendo la 1ª la que habla, la 2ª a la que se habla y la 3ª a otra persona que no encaja en ninguna de las categorías anteriores.
Es precisamente aquí donde aparecen los famosos yo, tú, él, ellos, nosotros, tú y ellos, precisamente para encajar las flexiones que requiere cada verbo según cómo se estructurará la oración.
modos verbales
Los modos verbales expresan la relación de una persona que habla con el hecho dado por el verbo. Existen tres tipos de modos verbales para expresar esta relación, que son: indicativo, subjuntivo e imperativo.
El modo indicativo expresa certeza en relación con el hecho, que es o será interpretado como real. Por ejemplo, en la oración: “Necesito comprar proyector nos vemos mañana” indicamos una necesidad, y este modo sirve precisamente para eso.
El modo subjuntivo expresa una suposición, es decir, una posibilidad o duda de un hecho que aún no se da como realidad o que no se puede dar como concreto. Ejemplo: “Si pudiera alcanzar las notas, sería cantante”.
El modo imperativo, en cambio, expresa una orden, es decir, una demanda que se espera que se cumpla. Se usa cuando quieres decirle a alguien que haga algo. Ejemplo: “Cómprame un chocolate, porque tengo ganas”.
Tiempos verbales y voces.
Y los verbos también tienen tiempos y voces que ayudan a construir un mensaje cada vez más coherente, claro y objetivo para las personas, y también te ayudaremos a entender más sobre este tema.
El tiempo verbal indica cuándo sucede algo y que está relacionado con el enunciado, y puede insertarse, principalmente, en pasado/pasado, presente y futuro. En este caso, es necesario entender en qué tiempo está tu oración para que el verbo se adapte a él.
Las voces verbales, en cambio, expresan la relación del sujeto con alguna acción expresada y que tiene su emoción reforzada en el tono de voz del sujeto, las más comunes son las voces pasiva, activa y reflexiva.
Conjugación de verbos y clasificación de verbos
Finalmente, es necesario comprender cómo se realiza la conjugación de verbos y la clasificación de estos verbos en la lengua portuguesa. Como hemos visto, el verbo se puede conjugar según el sujeto, el modo, el tiempo y la voz verbal.
Por lo tanto, la conjugación del verbo dependerá completamente de estos puntos y puede sufrir varios cambios en función de estas partes tan importantes de la estructuración de una oración.
En este caso, sabemos que una oración simple como: “María está comprando nuevos campanas extractoras para empresas” puede cambiar completamente según las variables que hemos visto a lo largo de este texto.
Cuando hablamos de la clasificación de los verbos, se dividen en las siguientes clases en lengua portuguesa:
- Verbos regulares;
- Verbos irregulares;
- verbos anómalos;
- verbos defectuosos;
- Verbos abundantes.
Puedes estudiar más sobre cada una de estas clasificaciones, pero ten en cuenta que cada verbo en portugués tiene su espacio dentro de al menos una de estas clasificaciones.
Los verbos y la era digital
Y no podíamos dejar de hablar de cómo el idioma portugués ha sufrido grandes cambios con la llegada de Internet y las redes sociales, y en consecuencia los verbos también han sufrido algunos cambios.
Con la automatización de las plataformas digitales, es normal ver palabras abreviadas e incluso mal escritas sin la debida corrección. Por supuesto, en un ambiente relajado, esto no será un delito, pero puede convertirse en una adicción.
Para quienes trabajan con la producción de textos o necesitan hacerlo en un momento dado, mantener algunas adicciones al lenguaje en el entorno digital puede ser un peligro para su producción.
Por eso, presta siempre atención a lo que escribes en las redes sociales para que las abreviaturas y los pequeños errores no se conviertan en vicios de escritura y acaben entorpeciendo tu productividad e incluso tu trabajo.
Lea mucho y siga buscando más conocimiento sobre el idioma portugués para estar siempre listo para producir textos y materiales aún mejores y ayudar a otras personas que no entienden sobre el tema.
Este texto fue desarrollado originalmente por el equipo del blog. Guía de inversiones, donde se pueden encontrar cientos de contenido informativo sobre diferentes segmentos.